columna ivan TreviñoLa experiencia adquirida por Héctor Melesio Cuén Ojeda en la actividad deportiva del Maratónismo desde su juventud, lo ha llevado a ponerlo en práctica en las diversas actividades de su vida personal, empresarial, académica y política.

 

Quienes practican este deporte, son personas con una serie de habilidades, entre las que destacan las atléticas, ya que deben de tener una buena condición física, a fin de poder saber en qué momento deben de apretar el paso o solamente trotar con la intención de no desgastarse, durante la justa deportiva.

 

Otra de las cualidades es la psíquica, ya que los extensos entrenamientos producen un desgaste físico emocional, en donde puede existir una serie de lesiones en la práctica o en la propia competencia, que se traducen en victorias o derrotas, es por ello que el maratonista debe de estar preparado mentalmente para cualquier eventualidad.

 

La tenacidad del maratonista, es sumamente indispensable, no darse por vencido y desarrollar con ello una gran resistencia en su actividad física o motriz. Quien corre este tipo de competencias, sabe que debe de desarrollar un plan a fin de regular el paso y poder correr diferentes tramos de la carrera con un plan establecido, logrando con ello distribuir equitativamente la energía sobre la distancia a cubrir.

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El maratonista debe de tener una capacidad intelectual, a fin de poder tomar decisiones en la carrera desde el punto de vista estratégico, es decir, saber cuándo apretar el paso o disminuirlo, evitando con ello el agotamiento; la voluntad es otra de las cualidades de un buen maratonista, quien tiene voluntad, puede ser perseverante e intensificar los esfuerzos a fin de llegar a la meta.

 

Como podemos apreciar, Héctor Melesio Cuén Ojeda, aplica su vasta experiencia como maratonista, en su vida política, ha obtenido triunfos, como derrotas, sabe cuándo apretar el paso, o simplemente trotar, es por ello, que a pesar de que muchos actores políticos pretende llegar antes de tiempo a la meta, desgastándose físicamente y emocionalmente, Cuén Ojeda va a paso lento, pero firme, cuidando los tiempo, no se agota, cuida la energía a fin de no desgastarse, sabe en qué momento deberá de apretar el paso, su tenacidad lo puede llevar a la meta deseada.

 

3 PUNTO CERO. - Muchos apuestan a la ruptura entre Cuen y Rocha, empero, no habrá renuncia, ni despido, se conocen de hace años, provienen de la casa Rosalina y conocen las reglas del juego. En política los acuerdos son para cumplirse.