columna joseluisEs cierto que cuando llegó el lobo nadie lo creyó, pero de nuevo el anuncio de la FGR de Gertz Manero, de que van contra el expresidente Peña Nieto por diversos delitos que ya se han manejado y manoseado con el caso Lozoya, como el soborno de ODEBRECH que ya no se sabe dónde quedó, hasta se llega a dudar si lo hubo y hay quienes dicen que Lozoya Thalmann se lo embolsó todo, el caso es que, de nuevo, aparece el expresidente Peña Nieto acusado por la fiscalía de la república, obviamente con el aval del presidente, y se da a conocer hoy, cuando MORENA, después de su aquelarre electoral del sábado y domingo, vive la cruda, el tiradero y los vidrios rotos que quedaron sin poder ordenar la casa.

 

Es cierto que MORENA vive su escándalo particular, pero no menos importante y trascendente es lo que vive el gobierno de la república y el presidente López Obrador, con las demandas de Estados Unidos y Canadá, que lo han acusado de violar el T-MEC, que sin duda ha puesto al presidente sumamente nervioso, al extremo que ayer martes envió una carta al presidente Joe Biden, advirtiendo que no violente la soberanía nacional.

 

Como también es real que para fines de agosto se da una fractura en MORENA y la 4T, cuando Ricardo Monreal deje la coordinación de los senadores y la presidencia de la Junta de Coordinación Política del senado al no ser ratificado y se anuncia relevo que saldrá de entre los senadores José Narro Céspedes y Alejandro Armenta Mier, después de más de un año de prácticamente rotas las relaciones del senador Monreal con AMLO.

 

Otro asunto que camina con el paso de los días y que no tiende a suavisarse, sino al contrario, cuando el presidente López Obrador envía esa carta al presidente Joe Biden, es la controversia económica sobre el T-MEC que en un caso extremo puede llegar hasta su ruptura, pero mientras tanto el presidente pretende incendiar la llanura política del país con su recalentado nacionalismo, buscando que todo pase y se resuelva a su favor, y de MORENA por supuesto, la sucesión presidencial y quién sabe qué pase con el T-MEC, la economía mexicana y las finanzas públicas por los costos que este pleito puede tener.

 

Por eso, pensar que la fiscalía general de la república, ahora sí, inicia una averiguación en serio y real contra el expresidente Peña Nieto, es una fantasía y un circo mediático, precisamente porque MORENA, la 4T y el presidente López Obrador necesitan cortinas de humo ante los escándalos políticos de MORENA, divisiones en sus filas y conflictos con Estados Unidos, sobre todo, sería como echarse un alacrán en la espalda cuando ha sido obvio que el presidente tiene un pacto con el expresidente Peña Nieto, pacto de protección que seguramente está garantizado y hasta blindado se podría afirmar, como para que trascienda el anuncio de la fiscalía general de la república que ahora sí irán contra Peña Nieto.

 

Todo eso es otra página más del circo político que se ha montado en el país la 4T y el presidente, que cada vez parece todo como una ficción y que nada, excepto los pesos para los pobres, es real. Ya veremos.

 

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